Dos jóvenes enamorados practican sexo con pasión, cariño, sensualidad y mucho amor

Como dice la gente sabia, el sexo sin amor no tiene ningún significado. Y esta pareja de amantes conoce muy bien ese dicho. Anna y John han quedado para hacer el amor después de estar mucho tiempo separados por culpa del trabajo. Se nota la sequía de relaciones porque ambos se pillan de muy buena gana. Empiezan a masturbarse lentamente el uno al otro. Ella coge su erecto pene y lo mueve de manera delicada y acompasadamente. Él se empieza a acariciar con sus dedos su húmeda vagina y tras un rato de estimulación se ayuda por un jugete sexual de marca satisfier. Después de unos delicados preliminares comienzan a hacer el amor. Ella se sube encima de su pene y nota como su novio la penetra hasta lo mas profundo de su ser. Ella recibe mucho placer, se nota claramente en su cara. Y es que el sexo cuando hay sentimientos detrás siempre es más placentero.

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