Kiley Jay es una niña que aún cree en el papa noel

La ya adulta jovencita siente mucho placer y ternura al ver a un hombre maduro disfrazado de papá noel por esa razón los que la graban la invitan a subir al automóvil y ella no lo piensa. Le da unos regalos muy útiles y que casualmente ella necesitaba, son unos dildos perfectos para penetrar su rica vagina. La chica disfruta de la adrenalina de tener sexo en la calle sumado a la perversión de ser follada por santa claus. Luego de ser penetrada con el dildo nuevo el santa le da de su barita de caramelos a probar para luego meterla dentro de su coño ya bien húmedo.

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