Esta pareja disfruta mucho del sexo al aire libre, por esa razón suele follar en las afueras de su jardín para poder sentir como el aire recorre sus cuerpos desnudos y sudados. Ellos sin duda alguna se aman pero no tienen problema en follar en el jardín aunque los vecinos puedan verlos mientras lo hacen. En una ocasión pudieron ver cómo su vecino pervertido de al lado los veía a través de la ventana y no paraba de masturbarse hasta acabar junto a ellos.
En una cama que colocaron de manera estratégica en el jardín la chica se encuentra sobre el chico mientras su gran polla entra y sale continuamente y sin parar de su coño mojado. La chica gime muy delicioso al sentir a su amado dentro de ella y le es imposible parar de besarle por todo su cuerpo mientras sucede. Cambian de posición sexual y ahora es la chica que se encuentra debajo. Desde esta posición ella puede sentir como la polla entra incluso más profundo que antes, por lo que grita mucho mas fuerte que antes. El chico sigue penetrando su agujero vaginal sin parar hasta que no puede más y echa toda su leche en sus ricas tetas blancas.
